domingo, 15 de agosto de 2010

Los cinco elementos. Entrega numero 14!!!!

Capitulo 27

El otro día me lo pase con Laura, fuimos a un centro comercial que la madre de Laura decía que tenía muchas cosas bonitas pero enseguida nos dimos cuenta que todo era muy costoso. Si queríamos comprar mucho mas teníamos que comprar poco allí. Íbamos saliendo de una tienda y mi amiga me comenzó a hablar.

- Ya no eres como antes Catalina, antes las dos hablábamos mucho mas y éramos casi iguales, ojala fuéramos iguales como antes ¿Qué te paso? ¿O es que tu novio te ha cambiado la forma de ser por una más serena? Talvez sea demasiado grande para ti.- Las dos nos reímos mientras nos sentábamos en una banca con vista a la plazoleta de comidas del centro comercial. Laura se quedo viéndome esperando una respuesta, tome dos sorbos de la botella de agua que tenía en manos y cerré la botella.

- De verdad que no se. Ojala fuéramos iguales, como antes. Pero las cosas han cambiado mucho desde que me entere que todas las noches me iba a convertir en una criatura horrible como…

De pronto se escucho un grito por todo el centro comercial y luego muchos más. ¿Qué pasaba? Laura y yo nos sentamos como algunos otros debajo de las mesas (por si era un ataque terrorista) y vimos como todos los demás corrían a nuestro alrededor sin saber donde se encontraba la salida del centro comercial. Un hombre que estaba corriendo se detuvo al frente nuestro con cara de horror.

- ¿Qué hacen? Corran que nos van a matar a todos.- El señor siguió su camino luego de gritarnos eso y Laura y yo fuimos las únicas que nos quedamos en ese pasillo, no sé que fue pero estábamos a punto de huir y lo sentimos. Nuestros sentidos de ángeles se activaron y note al enemigo con más fuerza que nunca. Laura y yo nos miramos y supimos que teníamos que quedarnos y ver que estaba sucediendo. Nos quedamos debajo de la mesa por un rato y luego lo vimos. Al fondo del pasillo nuestras miradas se encontraron con miles de espectros que tenían en sus manos unas enormes guadañas. Sus ropas estaban llenas de sangre de humanos y supe que estaban haciendo, estaban haciendo una limpieza al centro comercial, hacían filas e iban matándolos a todos conforme pasaban. Aterrador. Laura y yo decidimos pelear, además teníamos oportunidad pues yo era enorme transformada en ángel y tenía mucho fuerza. Nos levantamos del lugar y estábamos a punto de transformarnos cuando de pronto algo salto encima de nosotras con mucha fuerza y nos arrastro a la tienda más cercana que era una enorme de NIKE. Me senté (porque las paredes eran de vidrio y los espectros me podrían ver) rápidamente para ver que había pasado y lo único que vi fue a Laura y a un chico en el suelo levantándose. Ayude a Laura a alejarse lo más que podía de ese chico y las dos nos quedamos viéndolo mientras se sentaba. ¡No podía ser! Esto era peor que lo que estaba pasando afuera.

- Hola Catalina.- Dijo el chico de ojos oscuros sonriéndome.

- ¿Se conocen?- Pregunto Laura exigiéndome respuestas con sus ojos, yo simplemente lo vi a él con rabia pero él no dejaba de sonreír. Mis pies ya habían tocado el infierno.

- Laura, te presento a Alejandro.- Dije yo negándome a verlo a la cara. Yo tenía una mano en mi cinturón que era donde guardaba mi navaja, si él se me acercaba un paso más el iba a morir.- El es del colegio. ¿Lo recuerdas?- Laura lo pensó un poco y luego asintió feliz. ¿Sera que le decía quien era en verdad ese chico? Pero si le decía ella me preguntaría como lo había sabido.

- No puedo creer que seas tú. Es increíble.- Laura me miro con sus ojos que me decían que lo conquistara. Yo simplemente me levante con cuidado para que los demás espectros no me vieran.

- Ven Alejandro.- Dije yo con tono grosero, el me siguió hasta que estuvimos al final de la tienda y un mueble enorme de zapatos nos cubrían. Nos paramos bien y volví a coger mi navaja. El se dio cuenta de ese gesto.

- Calma Catalina, no ha sido mi culpa de que te hubiera gustado la experiencia de la otra noche.- Me sonrió pero yo lo arrincone contra la pared y le coloque mi navaja en su cuello. Nos quedamos un momento mirándonos.- ¿Tratas de ese modo a las personas que te salvan?

- Solo las que son ratas.- Ald se rio. Yo me quede quieta en donde estaba.

- Catalina, yo creo que ya me has dejado demasiadas cicatrices para que me sigas torturando, además te he salvado. Yo también me estoy escondiendo.- Lo pensé un rato y decidí mi peor error. Volví a guardar mi navaja en mi bolsillo y me senté cansada.

- Esas heridas fueron un recuerdo muy lindo y con mucho cariño para ti.- Dije irónicamente. Ald se sentó a mi lado y se quedo mirándome, yo mire al piso decepcionada de mi misma. ¿Por qué no podía asesinarle? El se dio cuenta de lo que estaba pensando y me recogió un mechón de cabello colocándolo tras mi oreja ¿Ahora que le pasaba a este?

- Creo que te entiendo. Yo tampoco puedo matarte aunque una parte de mi lo pide a gritos. Odio admitirlo pero en estos días he aprendido a tenerte cariño.- Le mire a la cara súper sorprendida ¿Me estaba hablando en cerio? No podía creerlo. Nos quedamos viéndonos por un largo rato y el poso su mano en mi mejilla. Se acerco a mí y nuestras caras quedaron rozándose por completo, el corazón me palpito a mil por hora. En ese momento solo estaba pensando en nosotros dos, no había nada más en el mundo. Nos besamos con cariño. Fue algo totalmente hermoso, sentí como si hubiera sido mi primer beso. Sus labios eran dulces y completamente cariñosos. Cuando dejamos de besarnos nos quedamos mirándonos a los ojos por un rato que me pareció eterno pero que quería que nunca se terminara. Sentí como si él me complementara, como si el solo tuviera cariño para brindarme y comprensión y yo necesitaba de eso más que de cualquier cosa. Le devolví el beso, esta vez un poco más intenso, quería beber de todo su ser. De pronto escuchamos un chillido al otro lado del almacén. Laura. Salimos de donde estábamos rápidamente y me encontré con Laura muerta de miedo tratando de ocultarse mientras que al otro lado de las paredes de cristal se veían miles de filas de espectros pasando, todos tenían puesto su traje color verde (lo que significaba que eran soldados especializados) y sus pasos sonaban al mismo tiempo. Parecían miles de clones pues tenían el traje impecable y su cara oculta tras una máscara, eran horribles. Parecía que las filas eran eternas y el único que pudo y que por fin reacciono fue Alejandro. Nos congio con cuidado para que ellos no se dieran cuenta de que estábamos en ese lugar a Laura y a mi del brazo y nos llevo al fondo del almacén detrás de los zapatos donde hace unos momentos el y yo nos habíamos besado tiernamente. Todos (los tres) nos juntamos lo más que podíamos en ese lugar y esperamos a que esa pesadilla que parecía eterna acabara. Ald y yo nos cogimos de la mano (sin que Laura se diera cuenta) y nos quedamos de ese modo por un buen rato hasta que vi todo lentamente negro y deje de escuchar los pasos de los espectros de afuera y el corazón de Alejandro que sincronizaba con el mío. Me había quedado dormida.


Capitulo 28

Desperté al otro día al lado de mi hermoso Alejandro. Abrí los ojos lentamente y un poco desconcertada por encontrarme en una tienda, solo olía a zapatos nuevos, recordé de golpe lo que había pasado esa misma tarde, había sido una horrible pesadilla y temiendo que aun estuvieran allí todos los espectros me arrincone rápidamente más hacia Alejandro, tanto que lo espiche y el despertó. Mis hombros estaban rodeados por sus musculosos brazos y recosté mi cabeza muy cansada en su pecho.

- Tranquila, ya se fueron. No queda ninguno.- Dijo el calmándome y besándome la frente. De todas maneras sentí que el trataba con sus brazos de cubrirme toda para poder protegerme. Sentía que un cariño infinito procedía de todo su ser y me voltee a ver sus ojos. Como había pensado, en su rostro estaba marcada la preocupación y también algo parecido al amor.

- ¿Entonces porque te veo tan tenso?- Me di cuenta de que estábamos hablando en susurros casi audibles. Yo sabía que nos estábamos ocultando de algo pero me sentía muy calmada pues mi instinto no marcaba ningún signo de espectros, a acepción de Ald que estaba a mi lado.- ¿Qué pasa?- El volteo a verme y sentí lo tenso que estaba, hasta su pecho me pareció incomodo.

- En este momento hay miles de ángeles en el centro comercial buscando a alguien de la raza del sur. Me buscan a mí. Y además nos tienen rodeados.- No podía creerlo, esto era muy malo, sobre todo si nos encuentran juntos pues seguro que con todos esos ángeles esta Grisel. ¿Quién nos va a salvar ahora?

- Laura.- Dije llamándola y buscándola con la mirada pero Ald me detuvo y me hizo verlo a la cara.

- Ella está con ellos. Dijo que los sentía y que iba a buscarlos, trate de detenerla pero tiene mucha fuerza. Seguro que ahora que le contó a los ángeles que yo estaba con ustedes ya le comunicaron quien era yo. Ahora piensan que te tengo secuestrada. Los escucho.- No podía ser. Laura debe de estar muy preocupada por mí, toda una raza debía de estar súper preocupada en salvar a su princesa. Sabía que si me encontraban iban a matar a mi tesoro. No podía dejarles.- ¿Tienes alguna idea? No voy a dejar que te hagan daño y tampoco que me lo hagan a mí. Aun soy muy joven para morir.- El se río nerviosamente pero yo me quede pensando en que hacer. Me apoye sobre mis manos y rodillas y me arrastre para poder ver por las paredes de vidrio. Ald tenía razón, ellos ya sabían que estábamos allí y nos tenían completamente rodeados.

- De hecho si tengo una idea. ¿Podrías atravesar un techo?- Pregunte yo sacando mi navaja y sujetándola con la boca.- Si puedes será nuestra salvación y nadie sabrá que estamos juntos.- Me dolía decir que estábamos los dos como pareja y cosas por el estilo, pero en ese momento no tenía la oportunidad de no hablar claro. Ald mostró en su rostro comprensión y sonrió como cuando me asechaba hace mucho tiempo. Era una sonrisa malévola pero me parecía sexy.

- Pero necesitare ayuda, no puedo volar.- Yo asentí y me transforme rápidamente. Ninguno de los dos cayó en cuenta de que mi ropa se había hecho trizas, en ese momento esto era muchísimo más importante. No necesite usar mis alas pues ya era muy alta y lo alce.- Gracias.- El también se transformo para tener más fuerza y rompió el techo en un enorme agujero. Salió rápidamente por ahí y me dirigió una mirada tratando de decir que tuviera cuidado y mucha suerte. Yo hice lo mismo y le mande un beso. Escuche como rompían la puerta de al frente y comenzaban a buscarme miles de linternas. Rápido tonta, no tienes mucho tiempo. Sostuve mi navaja con la mano y me hice heridas por todo el cuerpo, sobre todo el mis muñecas (con unos cordones que me los apreté en ellas) para que pareciera como si él me hubiera sujetado más de una vez en mis muñecas y me hubiera atado con algo. Agotada y muerta del dolor me recosté en el suelo y espere a que me encontraran. No pensé que fuera posible pero antes de que perdiera la conciencia por la pérdida de sangre (se me había pasado la mano en las heridas) pensé en solo una oración, en ninguna otra. ~ Los amo a los dos ~



Sentí cuando los ángeles llamaron a Grisel (cuando me encontraron), sentí como Gril me cargaba en sus brazos desnudos, sentí las lágrimas que resbalaban por las mejillas de mi amor, sentí cuando hice el viaje de nuevo a él que era mi mundo y sentí como un doctor curaba mis heridas. Pero a pesar de haberlo sentido todo no pude entrar en razón, no pude despertarme ni moverme. Cuando Gril me recogió quise calmarlo y decirle que todo iba a estar bien, que no llorara por mi porque no tenía ningún daño pero mis labios eran demasiado pesados, igual le pasaba a mis parpados y extremidades. Por un momento decidí quedarme de este modo por todo lo que me restaba de vida. No tener que cargar con el dolor de ver a los ojos a Gril, ni el dolor de querer tanto a Ald. Si yo hubiera seguido en ese estado de inconsciencia todo sería mejor, todo sería mucho mejor para mí.

Abrí mis ojos y me encontré con las sabanas de la cama que tenia en la base. Trate de despertarme un poco mas y pude ver donde me encontraba exactamente, era mi habitación y yo no estaba sola. Al lado derecho de la cama se encontraba Grisel dormido en una silla de madera. Que hermoso, se había quedado todo el tiempo a mi lado, ojala el pudiera decir lo mismo sobre mi. Se me vino a la mente la imagen de Alejandro, ¿Será que había podido escapar de ese lugar? Ojala, si no me moriría de una tristeza infinita que nadie podría calmarla porque yo no podría decir la causa de esta tristeza, decidí quedarme en cama y dormir un poco más, no solo porque estaba súper cansada si no porque no quería despertar a Gril y tener que encontrarme con sus ojos llenos de preguntas que no pueden tener respuestas para él. Pero para mi mala suerte Grisel se despertó. Cuando vio que yo también estaba despierta su rostro se ilumino de una alegría completamente pura.

- Mi amor, ¿Te sientes bien?- Dijo con cuidado como si sus palabras fueran a hacerme algún daño. Yo asentí con la cabeza lentamente. El siguió completamente feliz de verme despierta y yo claramente me odie por ser tan infiel a la relación tan bonita que teníamos.- De ahora en adelante te prometo que no dejare que nada te pase. No me importa que tenga que hacer para que ningún mal te toque, sin pensarlo lo haré.

- Si no piensas lo que haces podrías pagar muy caro amor Mío.- Dije yo con voz ronca y muy baja. Grisel me sonrío por haberle hablado. Se acerco hacia mí y me beso la frente con sus dos manos en mis mejillas.

- Pagaría mucho más caro si tú ya no pudieras vivir conmigo por toda la eternidad. O por lo menos hasta que tengas una muerte natural.- Los dos nos reímos aunque yo muy suavemente porque más o menos me acababa de despertar y estaba muy cansada.

- Te amo Grisel.- Dije queriendo estar más cerca de él. El se recostó a mi lado en la cama y me abrazo por atrás.

- ¿Qué paso en esa tienda?- Me quede callada por un rato tratando de acordarme de la mentira que les iba a decir a todos.

- Quería preguntarle algo del colegio y…- Acuérdate estúpida.- fuimos detrás de la tienda pero él me agarro las manos y me quería matar como a mis padres. Yo no quería morir Grisel.- Gril me acaricio los brazos diciéndome por un largo rato que nada de eso era culpa mía, que odiaba a Alejandro y le iba hacer pagar por el daño que me había hecho (incluyendo la muerte de mis padres). Me había metido en un muy grave problema.

4 comentarios:

  1. ESA CATALINA K MAL LE VAAAA BUENO A CASI TODAS SIEMPRE NOS GUSTA LOS CHICOS MALOS!!!! JEJEJE PERO NO CATALINA TU CON GRILLLLL :)

    ResponderEliminar
  2. DIOS MIOOO QUE EMOCIONANTEEE.. YA QUIERO MAS!!! :)
    yyy pobre catalinaa :( gril o alejandro..

    ResponderEliminar
  3. DIOOOS! es exceleente con qieen se qedara!! :DDD no dejes de subirlaa laa amoo pobree cataa espeero qe tome una buena decision :DDDD

    ResponderEliminar
  4. NO IIUU ALD! OSEA ESOZ XILOZ NO KONVIENENNN!! Y ADE+ ES SU ENEMY!!!

    ResponderEliminar